Tiempos de peligro total
Tiempos de peligro total, a nivel económico, social y hasta Moral. Quien diría que estamos en una situación apremiante, cada día que pasa en los noticieros y redes sociales aparecen tantos casos de sicariatos y desorden social que realmente causan un estado de amargura y tristeza.
Recuerdo que hace pocos días, comentaba entre una reunión de amigos colegas, sobre lo que vivimos y como la desintegración social está a la vista. Recordábamos que mientras estábamos encerrados en plena pandemia, lo que mas circulaba entre las plataformas digitales, era sobre “tiempos mejores y llenos de esperanza”. Volver abrazarse, reencontrarse con uno mismo, perdonar, ser “más humano” y hasta ser un buen devoto (para quienes abrazan la fe).
Contrario a todo ese idilio que alguna vez se añoró. La realidad nos golpea tan fuerte que no damos un punto de reacción. ¿A qué se debe que como país estamos en este laberinto sin salida? ¿En que momento perdimos el rumbo? ¿Por qué las autoridades políticas nacionales no demuestran autoridad alguna? Han pasado horas de otra tragedia carcelaria, pero nadie quiere asumir la responsabilidad. Todos miran hacia un lado, como esperando que pase las horas para que nuevas noticias o escándalos tapen la tragedia de forma rápida. Saben que somos un país tan sumido en la ignorancia y dados a lo viral que es cuestión de horas para que la indignación y la pena, dure tan poco.
No faltara el que quiere pescar en rio revuelto haciéndose pasar como el “hombre de las ideas y soluciones” creyendo que su labor es buena cuando lo palpable es que es vergonzosa y cuestionable. Porque tratar de captar admiradores o simpatizantes a coste de algo tan trágico debe tener un nombre y este seria: Repugnante.
Los “políticos” han hecho perder esa poca “fe” que se tenia en ellos, ya que las pugnas y la consigna de hacer caer al otro por no perder sus privilegios, se ha vuelto una práctica tan común que sin vergüenza alguna actúan ante la comunidad. La política no es carrera mala, son aquellos que con sus actos anti éticos la han convertido en casi un anatema.
En el actual estado fallido que se vive, ya no se sabe que esperar, ¿alguna otra matanza que no todavía no se haya dado? ¿Algún caso de un político que este inmiscuido en actos de corrupción? La verdad el futuro es tan sombrío y los tiempos tan aciagos que actualmente se viven llenan de mucha desilusión y desesperanza.
Para recuperarnos de todo el caos social que vivimos, nos tomara tiempo, rectificar errores que como sociedad también debemos asumir.
Puntualizar que este fenómeno no es exclusivo de nuestro país, en todo el mundo se vive una descomposición o crisis que va generando otras crisis difíciles de resolverla a corto plazo. Si hay algo que la historia nos ha enseñado que ante una eminente caída de un sistema, existe un tridente trágico que lo antecede: Una crisis económica, Corrupción y una descomposición moral. Si esto no llega a resolverse a tiempo nos vemos directo corriendo al abismo psicológico total y de esa crisis, créanme, no regresamos.