Moradores piden iluminación en la calle nueva de la 5 de junio

Moradores de la Ciudadela Pedro Menéndez Gilbert y la calle Amazonas, entre la Cooperativa 5 de junio y Divino Niño hacen un llamado a las autoridades y a la Corporación Nacional de Electricidad (CNEL EP) por la falta de luminarias en el sector, sobre todo del parterre central.

Un equipo de EL FERRODIARIO recorrió este sector para conversar con sus habitantes quienes cuentan que desde su regeneración ha sido una avenida muy comercial y transitada; sin embargo, el deficiente alumbrado público causa molestia entre los moradores.

La calle nueva de la 5 de junio, como es conocida,  conecta con una de las avenidas principales del cantón: la Avenida Nicolás Lapentti. Por el sector transitan buses intracantonales como la línea 16 de octubre / 18-2 que recorre los sectores: Cerro redondo, Oramas González, Primavera 1 y Secap los tubos; además de buses urbanos.

Danny Granda tiene un local de comidas en este sector. Él al igual que otros moradores llevan aproximadamente 2 meses viviendo en una incertidumbre por el deficiente alumbrado público. Esto representa un peligro para los negocios ubicados en este sector y sus moradores.

Lamentablemente por la falta de luminaria la clientela se ha ausentado, la gente teme salir porque pasan 2 en una moto y aprovechan la oscuridad para cometer sus delitos e ir robando. Pedimos a las autoridades correspondientes que nos ayuden con la luminaria en este sector. Tengo que cerrar mi negocio temprano por miedo de que se acerquen a robar o algo peor”, expresó Granda a este medio.

Por otra parte, el transporte público también ha disminuido su horario de recorrido por esta avenida. Incluso autos que hacen de taxi amigo o los llamados uber temen hacer carreras hacia este sector por el temor de ser asaltados o secuestrados.

Josué Naranjo es otro de los habitantes que tiene un local de licores en la ciudadela. Al igual que Granda, cuenta que las ventas han bajado.

«A partir de las 11 pm esto es botado, la oscuridad se presta para que jóvenes de dudosa procedencia y mal aspecto se acerquen a consumir. Antes cerraba a la 1 am y ahora con esta situación me quedo solo hasta las 11 pm”, indicó Naranjo.

Para “Rosita”, quien prefirió mantenerse en el anonimato, es compleja la situación que vive. Teme que en cualquier momento ocurra alguna tragedia. La inseguridad que se vive en el cantón asusta a más de uno, por esa razón prefieren no exponerse y guardarse en casa temprano.