Campaña ‘Ponte en mis patas’ remarca la relación entre la violencia social y el maltrato animal

El auditorio de la Universidad Casa Grande fue el escenario en donde se desarrolló la socialización de la campaña de concientización sobre el abandono animal ‘Ponte en mis patas’ a través de la experiencia sensorial el miércoles 31 de mayo.

La iniciativa es emprendida por la Fundación Refugio PANA, presidida por Katiuska Delgado, junto con las estudiantes de la Maestría de Comunicación con mención en Comunicación Digital de la Universidad Casa Grande, Diana Holguín y Carmen Carchi, con la tutoría de la docente Adriana Echeverría.

Vendados los ojos y escuchando relatos en audios, los asistentes pudieron ponerse en las patas de los animales que deambulan por la calle en circunstancias de frío, hambre y atropellamiento, complementados con la imaginación.

Además de la experiencia sensorial se realizó la charla ‘Maltrato animal antesala de la violencia social’, que estuvo a cargo de Katiuska Delgado, quien también es psicóloga clínica. Delgado señaló que la normalización del maltrato animal empieza en casa. “En la actualidad vivimos de manera constante un clima de inseguridad e incertidumbre. La violencia se expresa de formas relacionadas entre sí. El maltrato animal es, a la vez, un factor que predispone a la violencia social y, al mismo tiempo, una consecuencia de la misma”, dijo.

“La violencia es un acto intencional que puede ser único o recurrente y cíclico, dirigido a dominar, controlar, agredir o lastimar a otros. Casi siempre es ejercida por las personas de mayor jerarquía, es decir, las que tienen el poder en una relación, pero también se puede ejercer sobre objetos, animales o contra sí mismo”, aseguró Delgado.

Citando cifras de la última encuesta realizada por la Prefectura del Guayas en el 2018, Delgado indicó que se registraron solo en Guayaquil 500.000 casos de abandono entre perros y gatos, y agregó que de casos de maltrato no hay estadísticas, pero aquello también es grave por los reportes que reciben.